El objetivo de este artículo es actualizar y aportar ideas a los puntos de vista dadas por estudiosos del tema como Carlos Santos Carreto, Rana Kherewish, Francisco Peña Fernández, entre otros a quienes se tomó como referencia. La Biblia a lo largo del tiempo ha sido muy cuestionada por diferentes razones, sin embargo, ha ido demostrando por si misma que Dios es el que va liderando su ministerio. Cuando Alejandro Magno hubo conquistado el mundo, la Biblia, que hasta aquel entonces eran llamados como escritos sagrados, fue traducida al idioma griego dando así la unión de dos culturas y pensamientos diferentes. Con esto comenzó la gran confusión que hoy existe, el cual es la mescla de los libros sagrados con los apócrifos en la septuaginta, la cual pasaría a la vulgata latina con los mismos errores. En 1546 la Iglesia Católica aceptó estos libros como parte del canon sin embargo para la Iglesia Adventista del Séptimo Día deben de ser inspirados por Dios (canon intrínseco). Por lo tanto, se concluye que los libros apócrifos no fueron nunca parte del canon del antiguo testamento y que esta fue elección divina.